La Nutrición Parenteral Domiciliaria (NPD) es una modalidad de soporte nutricional que permite administrar nutrientes directamente al torrente sanguíneo fuera del ámbito hospitalario.
La NPD está indicada en pacientes con Falla intestinal crónica tipo III (FI cr)
La causa más frecuente de FI cr en nuestro país es el síndrome de intestino corto (65%), luego las alteraciones severas de la motilidad, obstrucciones por tumores malignos, las lesiones extensas de la mucosa intestinal y las fístulas.
La NPD puede utilizarse como tratamiento transitorio o definitivo. Se trata de una terapéutica compleja que require equipos multidisciplinarios muy capacitados ya que, durante el tratamiento, pueden presentarse complicaciones relacionadas al soporte nutricional en sí mismo o a la enfermedad de base, que afectan la sobrevida y la calidad de vida del paciente.
Los objetivos de la NPD son mejorar o mantener el estado nutricional, reducir las internaciones prolongadas y mejorar la calidad de vida del paciente.
El tratamiento domiciliario permite que el paciente permanezca en un entorno conocido, reduciendo el impacto emocional de la hospitalización prolongada. Posibilita mantener una vida familiar y social con participación en actividades cotidianas y eventos sociales, mejorando el bienestar psicológico. Brinda mayor autonomía en el cuidado, ya que el paciente y su familia pueden adquirir los conocimientos necesarios para el manejo de la conexión y desconexión de la bolsa de alimentación y los cuidados del catéter. Por otra parte, al disminuir las internaciones prolongadas, permite la liberación de camas hospitalarias para pacientes críticos o con necesidad de atención aguda. Esto se asocia a la reducción de costos hospitalarios: menor gasto en personal, insumos y recursos asociados a la hospitalización prolongada. También disminuye el riesgo de infecciones hospitalarias ya que al realizarse en el hogar el paciente no está expuesto a gérmenes hospitalarios.
La infección relacionada al catéter venoso es una de las complicaciones más frecuentes de la nutrición parenteral, tanto hospitalaria como domiciliaria. La tasa de infección en pacientes que reciben NPD varía ampliamente según el contexto clínico, las definiciones utilizadas y las medidas de prevención implementadas. Se considera una tasa aceptable: entre 2 y 6 episodios por cada 1.000 días de catéter. En Nutrihome, en el año 2024, la tasa reportada fue 0.9 episodios cada 1000 días.
En resumen, la NPD es un tratamiento esencial para pacientes con falla intestinal u otras patologías crónicas que impiden la nutrición oral o enteral. Proporciona beneficios significativos en la calidad de vida del paciente y optimiza el uso de recursos hospitalarios, siempre que se realice bajo el seguimiento de un equipo especializado y con protocolos estrictos de prevención de complicaciones, especialmente las infecciones relacionadas al catéter. Tasas menores a 1 episodio por 1.000 días de catéter son indicativas de un programa de alta calidad, con adecuada capacitación del paciente/cuidador y seguimiento continuo por el equipo de soporte nutricional.
Adriana Crivelli
Dra. en Medicina – Especialista en Gastroenterología
MP 16406 MN 126110
adriana.crivelli@nutrihome.com.ar
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